La feria líder mundial de la industria alimentaria, ANUGA, bullía con tecnologías de vanguardia destinadas a reducir el tiempo y optimizar los procesos, a las que Meat Tech Pro pudo enfrentarse durante la visita. Uno de los diseños innovadores es el tambor de corte "todo en uno" equipado con una picadora universal, que mereció los elogios de la ASOCIACIÓN ALEMANA DE AGRICULTURA - DLG. El sistema promete redefinir los estándares de eficacia y rapidez en el picado de carne.
Las picadoras industriales para picar carne fresca, carne cocida hasta 85°C, bloques de grasa o carne congelada hasta -25°C y otros productos alimentarios tienen sus áreas de aplicación fijas en el procesado de alimentos. Además de los requisitos energéticos, la versatilidad, el rendimiento y la calidad del producto final son criterios clave de evaluación de esta tecnología.
La picadora ‘todo en uno’ procesa material fresco y bloques congelados hasta -25 °C sin necesidad de cambiar el tornillo de trabajo ni el juego de corte. Se consigue un procesamiento cuidadoso y un corte claro con rendimientos por hora muy efectivos con cualquier materia prima. Las diferentes consistencias, p. ej. fresca y congelada, pueden procesarse simultáneamente o con retardo de tiempo.
El tambor de corte consta de un husillo de trabajo prolongado y un tambor cilíndrico perforado con una válvula de cambio neumática. Se utiliza en lugar del habitual juego de corte de cuchillas y placas perforadas. Permite triturar simultáneamente la materia prima al tamaño deseado y separar cuerpos extraños como partículas de plástico o láminas, así como componentes duros como tendones, cartílagos y fragmentos óseos.
Debido a la distancia mínima entre la extensión del tornillo y el tambor perforado, la materia prima se corta sin contacto y, por tanto, con una tensión mínima sobre el producto y un calentamiento mínimo (de 1°C a un máximo de 3°C). Además, se obtiene un 15-20% más de producto, un mayor rendimiento y menos subproductos o residuos.
Dado que el tambor de corte puede utilizarse junto con los conjuntos de corte convencionales en la picadora universal, es posible que una sola máquina funcione como molino, rompedora de bloques y separadora blanda. Esto ofrece la máxima flexibilidad con un menor consumo de tiempo y energía, reduce las necesidades de espacio y, en última instancia, se traduce en menores costes de inversión.
La aplicabilidad de esta tecnología también es posible en otras industrias alimentarias a medio plazo.
